Hoy es el Día Mundial de la Biodiversidad. Un día para reflexionar sobre qué futuro planeta queremos heredarles a nuestros niños y nietos, y la preocupante situación de ambiente a nivel mundial que afecta también a un pequeño tesoro para la biodiversidad como lo era Costa Rica. ¿Estaremos haciendo las cosas bien, en favor de esta tan preciada biodiversidad? Podríamos hacerlas más por resguardar ese tesoro? Las opciones económicas que nos presentan como la minería cielo abierto, la exploración petrolífera, la exportación de la piña (cuyas hectáreas productivas ya superaron las del banano), el desarrollo turístico de las costas de Costa Rica, la construcción de marinas para recibir a más visitantes, ... ¿son realmente opciones sostenibles desde el punto de vista ambiental que garanticen a nuestros hijos disfrutar de esta misma biodiversidad, ya de por sí agobiada por el continuo deterioro del medioambiente, la deforestación y la contaminación de nuestros ríos? Si Usted ya ha llegado a este punto de reflexión, es parte de esta celebración en el día de hoy.
Estudios recientes de la UCR y de la UNA demuestran que en los últimos 5 años, Costa Rica ha perdido la mitad de sus monos. El simpático mono Titi está ya incluído en las especies en vías de extinción. Las poblaciones del mono araña también están diezmadas. La lapa verde está prácticamente extinta. La roja en cambio está dando señas se recuperación, pero nada ún está garantizado para esta hermosa ave. Los amfibios de Costa Rica, más sensibles que otras especies al calentamiento global, están drásticamente disminuyendo en sus poblaciones. ¿Serán estas señales suficientes o necesitamos que más especies desaparezcan de Costa Rica para entender que la Madre Naturaleza no hace sino envíarnos desesperadas señales de alerta que aún no queremos ver y menos escuchar?
Como parte de las celebraciones del Día Mundial de la Biodiversidad, el Comité Bandera Azul Ecológica de San Miguel organizó una visita al INBIO de Santo Domingo de Heredia con 40 niños de las Escuelas de Castilla y Pbro. Ricardo Salas de San Miguel. Gracias al apoyo del Centro de Acopio de San Miguel y a la benevolencia de la Gerencia del INBIOParque, este Comité pudo realizar dicha visita de estos entusiastas escolares migueleños (4º, 5º y 6º grado) a unos de los más prestigiosos centros de investigación en materia de biodiversidad a nivel nacional, y, porque no decirlo, a nivel latinoamericano, localizado, para suerte nuestra en el mismo cantón de Santo Domingo de Heredia. Para este Comité, el INBIO Parque constituye sin lugar a dudas una valiosa herramienta de concientización para niños y grandes, y un incomparable recurso para la educación ambiental de escolares, que los domingueños, y en particular sus centros educativos, debieran de aprovechar mucho más. En particular el Programa ACACIA que permite que docentes adscritos al Ministerio de Educación Pública (MEP) amplíen sus conocimientos en materia de biodiversidad, recurran a métodos de enseñanza interactiva así como a materiales didácticos modernos utilizando el INBIOParque como aula abierta, y sean los guías de su propios alumnos en el descubrimiento de la biodiversidad. Desde ya, este Comité recomienda a cada Director de los Centros Educativos de Santo Domingo y del país en general a promover esta importante herramienta didáctica que ofrece el INBIO a las futuras generaciones de Costa Rica.
¡¡¡PENSEMOS EN ELLAS, TAMBIEN TIENEN DERECHO A CONOCER LAS MISMAS PLANTAS Y ANIMALES QUE NOSOTROS CONOCIMOS !!!
